Octubre-Diciembre 2005 , Nueva época No. 94-96
Xalapa • Veracruz • México
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Logran universitarios defender
plantas de la sequía

Edith Escalón

El método, que fue presentado en un congreso científico de Brasil, permite que las plantas capten y mantengan más agua y nutrientes
 

La prolina, un compuesto orgánico que permite que las plantas capten y mantengan agua y nutrientes en cantidades superiores, aumenta más de 300 por ciento con la aplicación de hongos micorrízicos en las raíces de las plantas, como demostró una investigación realizada por estudiantes de la Universidad Veracruzana (UV) en algunas especies desérticas.

Aunque reconoció que futuros trabajos son necesarios para esclarecer los mecanismos involucrados en esta relación, Jacob Bañuelos, uno de los autores del estudio, aseguró que con base en los resultados obtenidos se podría suponer que a mayor colonización de los hongos micorrízicos (HMA) más producción de este aminoácido.

Jacob, quien cursa el tercer semestre de la carrera de Biología en la UV, explicó que las micorrizas (hongos que únicamente pueden vivir en las raíces vivas de las plantas, por lo que dependen totalmente de la fotosíntesis de ellas) son captadoras de fósforo, cobre y zinc, principales nutrientes de las plantas, barreras para el desarrollo de enfermedades de la raíz y reductoras de la tensión fisiológica causada por condiciones ambientales extremas.

Junto con su compañera Guadalupe Sosa Valencia, Jacob ha demostrado que las micorrizas también aumentan, indirectamente, la capacidad de la planta para captar y mantener el agua, un descubrimiento vital para muchas especies del campo veracruzano que sufren las consecuencias de largas sequías.

Los resultados de este trabajo fueron presentados por primera vez en el Congreso Latinoamericano de Micología, en Brasil, al que asistieron los dos estudiantes gracias al apoyo de autoridades de la Facultad de Biología y de la Rectoría de nuestra casa de estudios. Ahí, explicaron a expertos en micología que las respuestas de las plantas a la deshidratación son diversas y complejas, incluida la acumulación de sustancias como la prolina, cuya concentración se incrementa notoriamente en condiciones de sequía, en alta o baja temperatura, así como por diferencias nutrimentales.

Según Jacob, los hongos micorrízicos están asociados con plantas de regiones áridas, regiones que se caracterizan por su microhábitat centrado en plantas nodrizas y por la integración de semilleros de hongos de varios tipos dentro de una comunidad vegetal, pues incrementan su sobrevivencia.

De acuerdo con el estudiante, los hongos mejoran el crecimiento de las plantas a través de la entrada de nutrientes y agua, al tiempo que permiten la tolerancia a la sequía: “A pesar de que las raíces de las plantas micorrizadas acumulan más prolina en sus tejidos que las que no tienen estos hongos, el conocimiento que tenemos acerca de este proceso es escaso, por lo que creo que muchos estudios son necesarios para integrar la función de los HMA con el sistema planta-suelo-hongos en los desiertos”.

Cabe señalar que el objetivo de esta investigación fue comparar el porcentaje de desarrollo de hongos micorrízicos y la cantidad de prolina en dos plantas con diferente metabolismo (Neobuxbaumia tetetzo y Mimosa luisana), para lo cual siguieron un procedimiento científicamente riguroso.

El trabajo de campo, informó el universitario, fue realizado en la reserva de la biosfera de Tehuacán-Cuicatlán, en Puebla, donde se tomaron muestras de seis individuos de cada especie. Posteriormente, llevaron a laboratorio las muestras para inducir la colonización de micorrizas. Este sitio fue elegido por el equipo de trabajo porque es una zona árida importante de México, que presenta un alto porcentaje de endemismo de plantas (más de 3 000) y la vegetación dominante es el matorral.