- Durante el XVII Foro de Experiencia Recepcional
- Edgar Santiago Contreras Romero recomendó algunos ejercicios de relajación que pueden hacerse en menos de 15 minutos
Edgar Santiago Contreras Romero presentó su trabajo recepcional de titulación.
Paola Cortés Pérez
El estrés académico afecta en la actualidad a un número creciente de estudiantes de nivel superior, de ahí que debe generarse todo tipo de investigación para prevenir enfermedades entre la población escolar, sostuvo el alumno Edgar Santiago Contreras Romero durante la presentación de su trabajo recepcional en el XVII Foro de Experiencia Recepcional, organizado por la Facultad de Pedagogía de la Universidad Veracruzana (UV).
Explicó que todas las personas experimentan estrés, en todos los ámbitos, sin embargo éste se vuelve problemático cuando excede los límites que pueden considerarlo positivo (conocido como eustrés).
Pese a que son pocos los trabajos relacionados con el estrés académico, el universitario dijo que encontró que los estudiantes están sometidos a él principalmente en periodos de exámenes, cuando duermen poco, consumen en exceso cafeína y comen poco o no comen.
“El estrés académico es aquel que padecen los estudiantes a través del proceso de cambio de los componentes del proceso enseñanza-aprendizaje, producto de la demanda exigida en las experiencias que se desarrollan en las instituciones educativas”, apuntó.
Entre los factores que pueden originarlo, mencionó, están la inseguridad, que afecta la vida cotidiana de los jóvenes; la falta de empleo; la violencia; el medio ambiente (ruido, falta de mobiliario, infraestructura insuficiente) y tecnológicos (el estudiante debe estar a la par que el desarrollo tecnológico).
La persona que está bajo estrés académico constante puede presentar síntomas físicos (dolores de cabeza, cansancio, fatiga, rechinido de dientes, disentería, impotencia, dolor de espalda, colitis), psicológicos (ansiedad, irritabilidad, indecisión, inquietud) y sociales (aislamiento, conflictos con otras personas, ausentismo, dificultad para aceptar responsabilidad, polemizar).
Contreras Romero señaló que el último capítulo de su trabajo está dedicado a los tratamientos que generalmente son utilizados para el control del estrés, tales como: métodos de relajación, psicoterapias, intervenciones sociales, prescripción de medicamentos, educación para la salud, entre otros.
Recomendó algunos ejercicios de relajación que pueden hacerse en espacios pequeños y en menos de 15 minutos, ejercicio para los ojos, yoga para dedos, rutina anti-estrés (generalmente se maneja en las oficinas), masaje para aliviar el dolor de cabeza (se presionan puntos de acupuntura y ayuda a liberar la tensión), ejercicios de respiración, así como ejercicios mentales.
El estudiante de la Licenciatura de Pedagogía concluyó que el estrés académico afecta el cuerpo, estado de ánimo y social, por eso consideró que es importante generar información para prevenir enfermedades que perturban el rendimiento y aprovechamiento escolar.
