Núm. 11 Tercera Época
 
   
encabezado
 
ENRIQUE MURILLO
FORMA Y ARMONIA
 
 
fotos
escudo uv
 
corre
 
  punto    Puntos de venta
  buzón Buzón del lector
  suscribete Suscríbete

 

lineamientos de publicación

 

 

 
 
 
Páginas <<< 1 2 3 4 5 >>>
 

 

La psiquiatría mexicana en deuda
Una semblanza de Rafael Velasco Fernández

Jorge Sánchez-Mejorada


Jorge Sánchez-Mejorada es médico cirujano por
la UNAM, especialista en Psiquiatría, Salud Pública y
Psicoterapia de orientación humanista. Investigador
de la UV, coordinó la Maestría en modalidad virtual
sobre “Prevención Integral del Consumo de Drogas”.
Es fundador y director de la Fundación Casa Nueva en
Xalapa, Ver., dedicada al tratamiento y rehabilitación de
adicciones.


Una ciencia sin conciencia no es otra cosa
que la ruina del alma 1
Pórtico de la Universidad de Montpelier, Francia.

          En noviembre del 2007, en el XX Congreso Nacional de la Asociación Psiquiátrica Mexicana (APM) titulado “Psiquiatría: compromiso social”, en la ciudad de Mérida, Yucatán, el doctor Rafael Velasco Fernández pronunció la primera conferencia magistral que, desde entonces, llevaría el nombre de Ramón de la Fuente Muñiz, distinguido psiquiatra mexicano fallecido en 2006. El gremio de la psiquiatría académica reconocía, a través de esta designación como orador principal, la trayectoria de quien fuera en su momento fundador y presidente de la propia asociación. Un año después, en 2008, el gobierno de la República otorgó al doctor Velasco el Premio Nacional de Medicina en el campo de la salud mental.

          Estos reconocimientos del más alto nivel invitan a reflexionar sobre las aportaciones de este distinguido médico a los campos de la salud mental, la psiquiatría, la paidopsiquiatría y la prevención del consumo de drogas. Una mirada a su recorrido profesional es importante para entender el contexto desde donde se construyen estas aportaciones.

  C.P.

 

          La visión integradora o integral de los fenómenos de la salud y de la enfermedad mental es, sin duda, una de sus aportaciones más significativas a la psiquiatría, aplicando este concepto a los problemas en los que ha profundizado a lo largo de los años. Su trayectoria es una muestra clara de esa búsqueda de espacios y posiciones desde donde ha hecho posible la generación y difusión de conocimientos científicos en el campo de la salud mental y la psicopatología. Del mismo modo, esta diversidad de espacios y posiciones ha convertido a Rafael Velasco en conocedor profundo de las realidades y las necesidades en el campo de la salud mental a nivel local, nacional e internacional.

          Se intersectan en su biografía actividades clínicas médico-psiquiátricas, de investigación, docencia y cargos públicos a nivel estatal, federal y universitario en los ámbitos de la salud y la educación. Dos vocaciones entrelazadas e indisolubles a lo largo de toda su vida: la del médico y la del maestro. Para fines de este trabajo pretendo sintetizar una descripción de su formación profesional para posteriormente analizar las que considero algunas de sus aportaciones centrales.

Dos vocaciones: el médico y el maestro

          En su biografía curricular se menciona que a los 17 años, en compañía de Sergio Galindo y otros jóvenes de su generación, participó como fundador e instructor en un centro de alfabetización para adultos. El deseo de estudiar medicina estaba presente desde su niñez y así fue que, como muchos jóvenes de su época tuvo que partir de su ciudad de adopción –Xalapa– a la Ciudad de México para cursar sus estudios en la Escuela Nacional de Medicina, ubicada entonces en la Plaza de Santo Domingo. Serían tiempos de decisiones importantes: el joven Velasco, amante del deporte y futbolista apasionado, tuvo que dejar en un segundo plano esas actividades para dedicarse de lleno a lograr su entonces más caro sueño: titularse de médico. La clínica y la nosología médicas despiertan en él el más vivo interés, precisamente por la aplicación del método científi co: racional e integrativo. Su formación médica se sustenta en buena medida en esta “buena clínica” que escucha, observa e interpreta los síntomas y signos dolorosos para deducir hipótesis o conclusiones diagnósticas. Cuando adicionalmente el médico cuenta con un elemento de empatía y genuino interés hacia su paciente, que genera confi anza, la relación médico-paciente se convierte en un ingrediente sanador. Ambos aspectos, el científi co y el de la relación humana, han marcado sin duda el quehacer del médico Rafael Velasco.

1 Rafael Velasco, Refl exiones y autocrítica. Palabras de agradeci miento con motivo de la entrega del doctorado honoris causa de la Universidad de Quebec, Canadá, 1986.

 
 
Páginas <<< 1 2 3 4 5 >>>
     
Hidalgo #9 • col. Centro • Xalapa, Veracruz, México • (2288)8185980, 8181388 • lapalabrayelhombre@uv.mx