Enero-Marzo 2004, Nueva época No. 73-75 Xalapa • Veracruz • México
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En breve, Casa de la Universidad en El Conejo
Dispara nuestra Universidad desarrollo en las comunidades del Cofre de Perote
Edgar Onofre Fernández

El servicio social estrecha el vínculo entre la Universidad y la población, y significa un soporte para el desarrollo comunitario: Arredondo.
El Conejo, Ver.- Con un fuerte trabajo social realizado en los últimos cinco años, que ha sido reconocido en los ámbitos nacional e internacional, la Universidad Veracruzana ha sentado las bases para apuntalar el desarrollo sostenible de la zona del Cofre de Perote (considerada una de las que presentan el mayor índice de marginación en el estado), gracias
El Conejo, Ver.- Durante una visita a esta comunidad, el rector Víctor A. Arredondo supervisó el avance de la construcción de la Casa de la Universidad. (Foto: Luis Fernando Fernández)

tanto a la labor de pasantes, académicos y gestores universitarios, como al apoyo de diversas instituciones del país y del extranjero.

Durante una visita a la comunidad de El Conejo, municipio de Perote, localizada arriba de los 3 500 metros sobre el nivel del mar y con una población dedicada al cultivo de la papa y a la explotación de los recursos forestales, el rector Víctor A. Arredondo supervisó el avance de diversos programas de servicio social y de la construcción de la Casa de la Universidad, en que se empeñan la UV y los pobladores, con el apoyo de la ANUIES, la Sedesol y la Fundación Ford.

Acompañado por funcionarios de la dirección de Vinculación General, integrantes de la Brigada Universitaria de Servicio Social, pasantes de Arquitectura que realizaron el proyecto del edificio y los integrantes del programa trilateral de Servicio Comunitario para América del Norte (NACS), Arredondo se reunió con las autoridades ejidales y municipales para conocer los avances de la cuarta Casa de la Universidad, que se sumará a las que ya funcionan en Coyopolan (Ixhuacán de los Reyes), Veracruz y Xalapa.

  Los responsables de la construcción del edificio, que está diseñado con base en las tradiciones constructivas de la región y atiende las extremas condiciones climáticas, explicaron que a finales de abril quedará concluida la primera fase del proyecto que incluye, además de las áreas para laboratorios de análisis clínico y ambiental, consultorios y aula de capacitación, otras que serán destinadas al albergue de brigadistas y un aula de usos múltiples.
El Conejo, Ver.- Integrantes del programa NACS se han integrado al trabajo que la uv realiza en esta comunidad ubicada en las faldas del Cofre de Perote. (Foto: Luis Fernando Fernández)

El rector informó que este centro comunitario será un firme soporte para la realización de tareas educativas en beneficio de la población, aprovechando las nuevas tecnologías, y precisó que el Instituto Latinoamericano de Comunicación Educativa (ILCE) ha donado una antena para contar con Internet vía satélite. Además, la Universidad de Princeton (EU) ofreció donar 15 computadoras para el área de capacitación de El Conejo.

La Casa de la Universidad, asentada en un terreno cedido por las autoridades ejidales, también está conformada por áreas abiertas para el esparcimiento y la realización de actividades artísticas, así como para la operación de un tianguis que permita la comercialización de los productos agrícolas e industriales de la región.
Luego de recorrer el edificio, Arredondo y los representantes comunitarios se trasladaron a la parcela demostrativa en que, con el impulso de los universitarios y el apoyo financiero de dependencias como las secretarías de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y de Desarrollo Social (Sedesol) y la Comisión Nacional Forestal (Conafor), se han realizado obras para la conservación del suelo, lo que será replicado en otras áreas para evitar la erosión de los terrenos destinados al cultivo de papa, avena y haba.

Ahí, el rector propuso a las autoridades de El Conejo desarrollar una empresa comunitaria para la producción y comercialización de pinos navideños, lo que permitiría la reforestación de al menos ocho hectáreas y su aprovechamiento forestal. También señaló que el Vivero Universitario, localizado en el Campus para la Cultura, las Artes y el Deporte de Xalapa, podría donar 20 000 plantas para su siembra en el mes de junio, al tiempo que la institución convocaría a estudiantes y egresados de carreras como Biología y Agronomía a colaborar en estas acciones.

Por otra parte, señaló que el trabajo de servicio social comunitario emprendido en 1998, en El Conejo, se ha reflejado en la salud de los niños e, incluso, ha propiciado un cambio importante en el papel desempeñado por las mujeres en la comunidad. “Esta labor se debería extender a las universidades del país, pues demuestra que el vínculo estrecho entre las casas de estudio y las comunidades significa un soporte para su desarrollo y crea en ellas una conciencia de solución de problemas y una visión social entre los estudiantes”.

Cabe mencionar que, a lo largo de su estancia en la comunidad, los integrantes del programa NACS–originarios de Canadá, Estados Unidos y México– no sólo han participado activamente en la construcción de la Casa de la Universidad, sino también en la creación de huertos familiares, el cuidado y manejo del bosque, la conservación de agua y suelo, el montaje de huertos, el análisis de elementos, invernadero y técnicas de horticultura biodi-námica, así como en actividades educativas. Todo ello en conjunto con estudiantes y vecinos del lugar.

Nos hemos vuelto alumnos de la UV
Habitantes de la comunidad aseguraron que, a partir de la presencia de la uv, “el conocimiento de los universitarios se ha integrado a nuestra vida y nos hemos vuelto alumnos de la universidad”.

En la reunión comunitaria con el rector Arredondo –en que estuvo presente el alcalde de Perote, Raúl Molina Ovando–, la señora Silvia Hernández Domínguez, en nombre de los habitantes, expresó que, a través de los talleres, han obtenido conocimientos que han mejorado su vida: “en el tiempo que ha estado la universidad aquí, hemos visto prosperar a nuestra comunidad. La Casa de la UV en El Conejo es algo histórico para nuestra población y bueno para el futuro de nuestros hijos”.

El presidente municipal reconoció que tener un centro como el de El Conejo es un beneficio que se puede extender a otras comunidades; de hecho, el trabajo de la UV ya se refleja más allá de las ciudades, pues está probado el apoyo que esta institución ha brindado para coadyuvar al desarrollo de comunidades rurales.