En Veracruz, la abundancia de los recursos marinos ha disminuido
notablemente debido a la sobreexplotación que ha sufrido
el mar en los últimos años, por lo que urge desarrollar
la maricultura sustentable para la producción y cultivo de
especies marinas, afirmó el investigador Virgilio Arenas,
director del Centro de Ecología y Pesquería (CEP)
de la Universidad Veracruzana.
Según estimaciones de este centro que reúne a especialistas
en ecología marina, 95 por ciento de productos marinos destinado
al consumo humano es extraído por pescadores mediante técnicas
artesanales, lo cual ha perjudicado el ecosistema debido a la falta
de un control formal en la extracción.
El problema se ha agravado porque el proceso de regulación
de la actividad pesquera es extremadamente difícil, puesto
que se necesitaría un buen número de inspectores para
vigilar cuánto se pesca, y aun cuando se pudiera organizar
el recurso humano, científicamente habría otros inconvenientes,
como la complejidad del ecosistema marino; por muchos factores no
es sencillo prever cuál es la tasa adecuada de explotación.
Si se compara lo que se pescaba hace 20 años en el sistema
arrecifal veracruzano con lo que se pesca actualmente, se puede
saber que ahora los recursos son magros en cuanto a diversidad,
tamaño y cantidad de especies que se extrae, a pesar de que
el esfuerzo pesquero ha aumentado. Es muy importante que se
comprenda que el mar como fuente de aprovechamiento ya está
saturado, particularmente el mar veracruzano, por eso no tiene sentido
aumentar el número de lanchas o el esfuerzo pesquero, porque
resulta cada vez más perjudicial.
Virgilio Arenas dijo que, así como se ha cultivado la tierra
desde hace siglos, deberá cultivarse el mar, pues no
podemos sólo extraer lo que se produce naturalmente.
De hecho, todo en el mar es cultivable, y ya existen mecanismos
y tecnología para cultivar mero, corales, trucha, jaiba,
camarón, pulpo, bagres, meros. De realizar esta labor se
podría evitar el deterioro de los ecosistemas naturales y,
además, contribuir al desarrollo económico de pescadores,
así como al rescate de las comunidades marginadas del país.
Como propuesta alterna destacó la maricultura asociada con
la biotecnología marina, es decir, la búsqueda de
organismos con capacidades genéticas valiosas para la farmacología
o la industria alimentaria. En las especies marinas se han
encontrado poderosos antibióticos, antipiréticos,
antitumorales, sustancias que a partir de un trabajo de investigación
han sido aprovechadas para contrarrestar muchos padecimientos.
La esponja marina, por ejemplo, produce un importante antibiótico,
pero si se extrajera toda la que hay en los arrecifes localizados
frente al Puerto de Veracruz sólo se obtendrían alrededor
de 20 toneladas y, de ellas, 100 gramos del antibiótico que
tarde o temprano se agotaría. Lo que necesitamos es
comprender el proceso de reproducción del antibiótico,
obtener los tejidos de la esponja, cultivarla si es necesario, estudiar
la genética que produce el antibiótico, introducirla
en bacterias para que ellas produzcan el antibiótico: eso
es biotecnología.
Esta actividad, aunada a la mari-cultura orientada al consumo, le
daría al ecosistema marino un valor agregado y nos permitiría
obtener del mar sus valores más importantes. Para lograrlo
se necesitan metodologías comprobadas, seguras y sustentables,
personal capacitado, vinculación con las comunidades costeras
es decir, toda una estrategia científica que respalde un
proceso de aprovechamiento sustentable de los recursos marinos.
El
CEP es trasladado a orillas del río Jamapa
Después de tres años de haber permanecido en la ciudad
de Xalapa, el Centro de Ecología y Pesquería será
trasladado al municipio de Boca del Río, a orillas del Río
Jamapa, cerca de su objeto de estudio: el mar. Virgilio Arenas informó
que durante este año serán desarrollados cuatro grandes
proyectos orientados a evaluar la variabilidad de la calidad ambiental
de las aguas marinas adyacentes al Sistema Arrecifal Veracruzano.
Simultáneamente se realizarán dos grandes proyectos
orientados a conocer la variación espacial de la diversidad
biótica. Para este fin, los investigadores universitarios
examinarán la abundancia, naturaleza y estado de salud de
los corales, esponjas y peces en 19 arrecifes; paralelamente analizarán
la diversidad biológica de un área de 2 000 metros
cuadrados en la laguna Arrecifal de la Isla de Sacrificios y la
Isla Verde, ambas frente a las costas del Puerto de Veracruz. En
estas islas se espera identificar las más de 2 000 especies
que forman parte de la biodiversidad del área.
Asimismo, se busca avanzar en el proyecto Manejo sustentable
de la pesquería del pulpo, cuyo propósito es
evaluar la viabilidad de mantener en cautiverio esta especie y aumentar
el volumen de los ejemplares jóvenes.
Los proyectos del centro mencionado se realizan en colaboración
con la Dirección del Parque Arrecifal Veracruzano, el Acuario
de Veracruz y organismos especializados como el Instituto Tecnológico
del Mar y el Centro de Educación Técnica del Mar.
El equipo de investigadores del cep está integrado, además
del director, por Enriqueta Velarde, Lourdes Jiménez Badillo,
Alejandro Granados, Luis Abarca, Horacio Pérez España
y Juan Manuel Vargas, quienes son apoyados por Dorina Basurto, Fernando
Hernández y Miguel Ángel Lozano.
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