Junio 2003, Nueva época No. 66 Xalapa • Veracruz • México
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Organizado por el Instituto de Investigaciones Psicológicas
Estudian en la UV variación
genética de especies forestales

Gina Sotelo

Para determinar la base genética de la variación morfológica, anatómica, fenológica y fisiológica de poblaciones de especies forestales que sirven como soporte a las vertientes de estudio en mejoramiento genético y biotecnología, el Instituto de Genética Forestal (IGF) está reuniendo el trabajo de varios investigadores de su departamento de Biosistemática.
Los estudios de tal índole son necesarios ya que, a raíz de los cambios que han causado variaciones en las especies forestales, deben cuantificarse sus diferencias para poder establecer las estrategias para su conservación y explotación, apuntó la investigadora Lilia del Carmen Mendizábal Hernández, y explicó que la biosistemática sugiere conocer cómo varía un árbol en relación con otro, una población con otra, una semilla con otra y el tamaño de las acículas (hojas) entre individuos de una misma especie.
Este tipo de investigaciones se realiza en México y América Central. En el estado de Veracruz se lleva a cabo con los pinos que habitan su geografía, con el fin de conocer la variación,
Lilia del Carmen Mendizábal Hernández, investigadora del Instituto de Genética Forestal. (Foto: César Pisil)
 

determinar la función de las especies y cuáles pueden tener mayor capacidad de producción de madera, como parte de su mejoramiento. “En suma, conocer a través del germoplasma, el vigor de los árboles y seleccionar a los mejores para establecer ensayos en campo con el fin de alcanzar el mejoramiento genético”.
La investigadora informó que estos estudios incluyen un objetivo más que es la conservación de los bosques, ya que al mejorar genética-mente a una especie se pueden aprovechar los recursos sin perjudicar el equilibrio ecológico. “Para regenerar los bosques y formar plantaciones que tengan óptimos rendimientos, primero debemos conocer la naturaleza y los componentes de nuestras plantas y de las especies que habitan en nuestro país”.
Desde que se conformó el igf, en 1984, se realizan estos ensayos genéticos en Veracruz, desde el nivel del mar hasta el Cofre de Perote, a más de 1 400 metros sobre el nivel del mar. Además, como parte de los trabajos, se han introducido especies de pinos de otros estados del país y muchas se han adaptado lo suficiente. De hecho, los investigadores y alumnos de la maestría en Genética Forestal han establecido convenios con las localidades que demandan mejorar su producción maderera a través de plantas experimentales producidas en los invernaderos del instituto.
Sin embargo, indicó Carmen Mendizábal, es un poco difícil establecer plantaciones en estos lugares, ya que le gente no se compromete mucho a cuidar una plantación forestal debido al largo tiempo de espera para obtener beneficios. El interés viene de personas que poseen terrenos sin uso comercial. Gracias a ello, este centro de investigaciones ha plantado pino, cedro, caoba y liquidámbar en San Juan del Monte, en las reservas de Perote y Orizaba, en Calculalpan, en la zona de Los Molinos de Perote, en Los Tuxtlas y en el Instituto de Ecolo-gía, entre otros.